Cómo hizo Dinamarca para convertirse en el único país de Europa Occidental ocupado por los nazis que pudo salvar a su población judía
El 29 de septiembre de 1943, un rabino danés interrumpió el servicio matinal en la sinagoga de Krystalgade en Copenhague y dijo: "No tenemos tiempo para continuar con las oraciones".
"Tenemos noticias de que este viernes por la noche, la noche entre el 1 y el 2 de octubre, la Gestapo vendrá y arrestará a todos los judíos daneses. Tienen una lista de direcciones y vendrán a la casa de cada judío y nos llevarán a todos a dos grandes barcos que esperan en el puerto de Copenhague y a los campamentos en el continente", advirtió Marcus Melchior.
"Hay dos cosas que deben hacer", dijo además el rabino.
"Número uno, mantenerse alejados de sus hogares el viernes por la noche. No sabemos lo que sucederá después, pero el viernes por la noche no estén en sus casas".
"Número dos, transmitan esta noticia a todos sus amigos, familiares, a quien puedan, para que también sepan que deben irse de la casa para el viernes".
Y los días que siguieron marcaron una de las historias de resistencia más notables de la Segunda Guerra Mundial.
https://www.bbc.com/mundo/vert-cul-45804793
Y que bien que se salvaron vidas, pero esa es una versión edulcorada como sucede con todas las versiones “heroicizadas” después de la guerra. En todas las versiones, “todos formaban parte de la Resistencia”... para reclamar alguna recompensa.
Bueno, ya sin tanto dulce, tal vez no fue Dinamarca quien salvo a los judíos como reza el titulo sino Alemania. Es posible que fueron los propios alemanes los que soltaron el aviso. Luego, las barcazas fueron bien pagados por la Resistencia y los propios judíos, mientras los alemanes hicieron al sueco, sin detenerlos. Simplemente, a los alemanes no les interesaba matar judíos, el objetivo era limpiar Dinamarca. Al SS-Obergruppenführer, Werner Best, no le importaba la forma en que debía dejar Dinamarca "juddenfrei": deportados a campos o escapados a Suecia. Lo que contaba era cumplir su misión.