Queda citado para la posteridad, la gente sin tantas ganas de vender autoritarismo saben que las políticas liberales funcionan hasta que el país se recupera pese a ellas, se muere del todo o se hunde en el caos social... Y ningún economista honrado lo negará, ni afirmará saber qué pasará este año o el próximo.Ver citas anterioresDon José escribió: ↑03 Ene 2025 14:18 Date cuenta de lo doloroso que puede resultar para un izquierdista español observar esta situación. Sus representantes políticos, incluidos algunos miembros del Gobierno español, han estado activamente oponiéndose a Javier Milei, incluso llegando a provocar crisis diplomáticas sin precedentes. Se le ha tildado de loco, drogadicto, fascista y ultraderechista. Sin embargo, contrariamente a las predicciones más pesimistas, parece que las cosas no le están yendo tan mal; de hecho, está sucediendo justo lo contrario.
El ajuste económico impulsado por Milei está teniendo efectos colaterales, algo que era esperado y que él mismo advirtió. Desde el principio dejó claro que no sería un camino fácil, pero lo que prometió, lo está cumpliendo. Esto contrasta notablemente con el principal partido del Gobierno en España, cuyos representantes han demostrado ser unos mentirosos compulsivos, sin ningún reparo en contradecirse. Son capaces de afirmar una cosa un día y, al siguiente, defender lo contrario, justificándolo con argumentos como haber cambiado de opinión. Incluso llegan a afirmar que cuando se hizo la promesa se hablaba como candidato a presidente, y cuando se incumplió, ya se actuaba como presidente del Gobierno, sugiriendo que eran prácticamente dos personas diferentes.
Este nivel de desfachatez y corrupción moral que se observa entre los izquierdistas —especialmente, socialistas— resulta alarmante y vergonzoso. Y es muy difícil para ellos digerir que un tipo como Milei, con su ideología libertaria e, incluso, sus formas directas y sin cortapisas —tan alejadas del cinismo, la falsedad y la manipulación intrínsecas al sanchismo, junto a ese carácter melindroso que proyectan—, le vaya tan bien, haciendo que mucha gente se pueda sentir seducida por el personaje y la ideología del presidente argentino. Es algo que, sin duda, no pueden permitir. Por eso hacen uso de la propaganda mediática, para manipular el relato y así contrarrestar sus éxitos.
Como con Bukele, esperemos y veamos.
.