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Logan escribió: ↑14 Nov 2020 12:14
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Mar.bo escribió: ↑10 Nov 2020 01:24
El problema esta en que los nuevos activos normalizan la decadencia de forma que lo decadente se vuelve normal
Recurriré a una figura propia de la termodinámica, la entropía. Esta mide el grado de desorden en un sistema, a mayor entropía mayor desorden. Desde el punto de vista social la multipluralidad lleva necesariamente a un grado mayor de antagonismo social. En una sociedad tradicional las disidencias fácilmente son aisladas/eliminadas, en las sociedades pluriculturales la disidencia es la norma. El caos anuncia el final.
No te entiendo, lo que es débil desaparece con los nuevos activos y seguro acabaran desapareciendo sin siquiera absorberlos, simplemente su agonía durará más. LO que es fuerte los absorbe.
EE.UU, UK, Francia no se abocan a su fin ni al caos por absorber disidencias
La diferencia entre los nuevos activos de antes y los actuales es que los antiguos obedecían a necesidades, los actuales son teledirigidos e impuestos por una minoría. La fortaleza de los nuevos activos no está en ellos sino en la campaña que se hace a su favor, ni son una necesaria renovación de los débiles sino una imposición ilogica y contranatura.
Los nuevos activos nunca se aparecen desnudos siempre vienen con programas políticos, económicos y sociales bajo el brazo que nos venden como cura de todos los males. En realidad es lo contrario, son asesinos con piel de cordero. La meta es instituir un Nuevo Orden.
Olvídate de las frasecitas dulzonas y su jerga de vende-carros usados sobre las “libertades” (de opinión, sexual, religiosa, dd.hh.) de las “igualdades” (de genero, pensamiento, políticas, raciales) de las “fraternidades” (mundiales, universales, galácticas), lo suyo es un Nuevo Orden.
Un Nuevo Orden basado en la homogenización a través de la atomización, la desnaturalización a través de la feminización, la desorganización a través de la infodemia, la desmoralización a través de la expansión del pentecostalismo, la neoproletarizacion a través de la neofeudalidad corporativa, y finalmente la brutal censura a través de la discursiva derechohumanologa
Lo nuevo no es una renovación, lo nuevo es ruptura con lo anterior, sin garantía de mejoría o bondad. Por primera vez desde la Revolución industrial no hay perspectiva de mejoría para las próximas generaciones.