No comparto en absoluto eso de que Puyol nunca ha sido independentista. Quizás yo esté equivocado, pero desde mi modesto punto de vista, los catalanes han sido tan independentistas como los vascos, y si me apuras, incluso más. Lo que ocurre es que han sido más hábiles y sutiles a la hora de reivindicar o exigir cualquier tipo de derecho, concesión, subvención, etcétera. Desde el mismo momento en que el honorable Josep Tarradellas regresó a España desde el exilio, y exclamó desde el balcón de la Generalitat el célebre... “Já sóc aquí"...los catalanes tenían muy claro cuales eran sus prioridades, y cual iba a ser el proceso a seguir para conseguirlas. Y una vez que accede el honorable Jordi Pujol a la presidencia de la Generalitat, se encuentra con una mayoría que le permite gobernar sin sobresaltos, y con las manos libres para ir poquito a poco allanando el camino hacia la independencia. Y dada la calma chicha que supone estar en mayoría absoluta, el honorable Jordi Pujol se debió de hacer la siguiente pregunta: ¿ y qué prisa tenemos los catalanes en exigir la independencia, si estamos gobernando a nuestras anchas, y casi todo lo que pedimos a Madrid nos lo conceden ?. Por si fuera poco, cuando los socialistas pierden la mayoría absoluta en 1993, resulta que CIU se convierte en una pieza fundamental para que pueda seguir gobernando el PSOE y... ¿que es lo que ocurre...?, pues que si antes había habido buen rollo entre ambas formaciones...ahora más, y mejor.Ver citas anterioresAsimov escribió: ↑21 Abr 2024 19:59No es cierto: ni CiU ni el PNV planteaban la independencia por entonces. Ni en su programa, ni en su discurso ni en su práctica política. Eran partidos nacionalistas, no independentistas.Ver citas anterioresdaktari escribió: ↑21 Abr 2024 13:22 Y para terminar...te recuerdo que al fascista hijo de puta de Aznar no le dolieron prendas en 1996 para comerles la polla a los independentistas vascos y catalanes, con tal de que le dieran su apoyo para poder ser investido presidente del Gobierno de España.
No es la primera vez que he leído esa trola por parte de la gente de tu partido, así que supongo que forma parte del argumentario del PSOE para intentar disminuir la responsabilidad de Sánchez a la hora de darle al independentismo catalán todo lo que pida. Pero no, es una trola del PSOE para intentar cambiar la historia. Como también lo era aquello de que Fraga hizo campaña por la abstención en el referéndum constitucional de 1978.
Y llegan las elecciones de 1996, donde el Partido Popular gana por un escasísimo margen de votos al PSOE, y CIU se deja engatusar por el Partido Popular para que le apoye en la investidura de Aznar, ¿ y qué ocurre ?...pues ocurre lo mismo, e incluso mejor. Pero como suele ocurrir en algunas relaciones de pareja..." Me enamoraste, y de caricias y besos...me colmaste, y cuando ya no te servía...de ti me apartaste”. Pues bien, esto es más o menos lo que le ocurre a CIU con el Partido Popular, cuando este último logra la mayoría absoluta en el 2000. Y es a partir de aquí cuando el sentimiento independentista se revuelve en las catacumbas en que lo habían dejado descansar los nacionalistas catalanes, y sobre todo...cuando la cúpula de CIU vislumbra el abandono de la política activa del molt honorable Jordi Pujol. Y como ellos saben que el otrora conseller en cap, Artur Mas, no tenía el carisma del molt honorable Jordi Pujol, y por tanto, intentar captar el voto de la burguesía catalana sin Pujol era poco menos que un suicidio...pues tiran por la vía del discurso nacionalista...con marcados tintes independentistas, eso sí...con mucho seny catalán. ¿Y qué es lo que ocurrió ?...pues lo que se veía venir…que se ha había notado el tirón que tenía Pujol, y CIU optó por inclinar la balanza un poco más hacia la izquierda. Y si a esto le unimos la subida que tuvo ERC...! ojo!...gracias a su discurso claramente independentista, pues hay tenemos los resultados de esta “película”.
Y respecto a los vascos, pues más de lo mismo...pero llevado a cabo de una forma más violenta y radical de como lo llevaron a cabo los catalanes. Todos sabemos que el PNV se abstuvo a la hora de votar la Constitución del 78, a pesar de los intentos de Juan de Ajuriaguerra (aunque no ocupaba ningún cargo público, era la figura indiscutible dentro del PNV por aquellos años) de que había que votar a favor del sí. La clave estuvo cuando Juan de Ajuriaguerra enfermó de manera inesperada a comienzos de agosto del 78. El centro hospitalario donde estuvo ingresado parecía la romería del Rocío por la cantidad de peneuvistas de ambas facciones (los que estaban a favor del sí, y los partidarios del no) que se acercaron a ver al moribundo Ajuriaguerra, en parte, para interesarse por su salud, pero principalmente...para conseguir inclinar la voluntad del moribundo en tan delicada cuestión. Un día, Txomin Saratxaga (reconocido peneuvista e íntimo amigo de Ajuriaguerra) se encuentra con Xavier Arzalluz y Eli Galdós, que salían de visitar a Ajuriaguerra, y estos le dicen: “ Ha dicho que debemos votar sí a la Constitución “. Pero Saratxaga no se quedó muy conforme con lo que le habían dicho Arzalluz y Galdós, y una vez a solas con Ajuriaguerra, le preguntó: Sobre el asunto de la Constitución, ¿cuál es su opinión?, la respuesta fue tajante: Tenéis que trabajar fuerte para que salga el sí. Desgraciadamente Ajuriaguerra fallece el 25 de agosto de 1978, y con él se entierran las posibilidades de que el PNV hubiese votado a favor del sí a la Carta Magna. A partir de aquí, los nacionalistas vascos han ido subiendo el tono de sus pretensiones independentistas, sustentadas por dos motivos fundamentales: el primero, y más importante, la larga sombra de ETA, que es la que de alguna manera fuerza al PNV a adoptar posicionamientos más virulentos en el tema de la independencia; el segundo motivo, al igual que en el caso de los catalanes, por las sucesivas victorias electorales del PNV que le han permitido campar a sus anchas en Euskadi desde 1980.
Y por último…tan solo decirte que te guste, o no te guste, a pesar de ser uno de los ponentes de la Carta Magna de 1978, el tiranosaurio Manuel Fraga Iribarne postuló por la abstención en el referéndum de la Constitución de 1978, y según parece, lo hizo de manera sibilina, cobarde, y en según qué foros. Y lo hizo entre otras cosas porque no estaba de acuerdo con el título VIII....”porque era completamente innovador”, ni con las, según él, ambigüedades del título VII. Y hay más, otros de los puntos que a él no le gustaban, era el de la regulación de la iniciativa popular y el referéndum, que según él, era el menos democrático. Así como el artículo 2º, el cual Fraga lo consideraba el caso más grave...al introducir el término “nacionalidades”.
Previo al referéndum del 6 de Diciembre, según los datos que he consultado, las contradicciones en el seno de AP rompían todos los puntos de las costuras de su traje político. La Junta Nacional, en su reunión del 30 de Octubre de 1978, emitió un comunicado pidiendo el sí. Al día siguiente se votaba en Pleno. ¿Qué votó su grupo parlamentario? Pues 9 votaron sí (entre ellos Fraga y López Rodó), 2 se abstuvieron (Licinio de la Fuente y un tal Álvaro de la Puerta ¿ te suena ') y 5 votaron en contra (entre ellos Federico Silva Muñoz y Gonzalo Fernández de la Mora). ¿ Y qué ocurrió el día 6 ? Pues lo que ahora puede ser el electorado de la derecha...se abstuvo más de lo debido o votó no jaleados por la parte de los siete magníficos que estaban en contra y ante las dudas de un Fraga que decía sí con la boca pequeña mientras a diario ponía palos en la rueda del carro democrático en su intento de unir a eso que él llamaba la mayoría natural. .
Este párrafo en negrita y en cursiva está extraído del enlace que te adjunto a continuación.
https://www.nuevatribuna.es/opinion/jos ... 57732.html