Antes que nada te ruego que no insultes, porque aquí, como en todas las facetas de la vida, sobran faltones y/o maleducados.Ver citas anterioresElPizarreño escribió:Pero vamos, tonto a las tres, ¿en que plaza o edificio ves expuesto algún signo que represente al Frente Popular o cualquier otra institución que se le pudiera hacer responsable de esas cifras que traes?Ver citas anterioresOptio escribió:¿No? ¿Entonces cómo se explica que la reforma que pretenden introducir los mismos que la aprobaron en su día hará que sea delito ensalzar sólo a uno de los dos bandos contendientes, a pesar de que el otro también cometió terribles crímenes de guerra?Ver citas anterioresCero07 escribió:La Ley de Memoria Histórica no fue redactada con afán revanchista. Basta leerla sin anteojeras para darse cuenta.
No voy a seguir con el tema, el hilo va Wyoming y del catarro de Dani Mateo.
¿O por qué el artículo 15 de la Ley dice que las Administraciones públicas, en el ejercicio de sus competencias, tomarán las medidas oportunas para la retirada de escudos, insignias, placas y otros objetos o menciones conmemorativas de exaltación, personal o colectiva, de la sublevación militar, de la Guerra Civil y de la represión de la Dictadura, y no exige lo mismo para los escudos, insignias, placas y otros objetos de exaltación, personal o colectiva, del Frente Popular, a pesar de que los milicianos de los partidos que lo sustentaban asesinaron a entre 50.000 y 60.000 personas (más o menos el doble que los represaliados por la dictadura de Pinochet y la de los militares argentinos juntas)?
Es que hace falta ser bobo.
En Madrid y Alcobendas, y seguro que en algunas ciudades españolas más, encontramos calles dedicadas al socialista Largo Caballero. Un personaje al que llamaban, con mucho gusto por su parte, el Lenin español. ¿Y sabes por qué (ahora, si fuera como tú, añadiría ignorante; pero como no lo soy, a Dios gracias, no lo haré)? Pues porque quería hacer en España la misma revolución que sus camaradas hicieron en Rusia, para instaurar la misma dictadura del proletariado. Que, como su nombre indica, era una dictadura en la que no se respetaban ni mínimamente los derechos humanos.
Y este personaje fue uno de los muchos líderes del Frente Popular (PSOE, PCE y ERC) que incitó al pueblo a ejecutar la "justicia popular", injusticia que fue la que provocó los más de 50.000 asesinatos producidos bajo el gobierno del Frente Popular.
En Zaragoza existe una calle dedicada a la diputada socialista Margarita Nielken, que para tu conocimiento escondió en su casa al capitán Condés, de la Guardia Civil, que fue el cabecilla del comando parapolicial socialista que el 13 de julio de 1936 secuestró y asesinó a José Calvo Sotelo, uno de los dirigentes de la derecha en el Parlamento.
En San Sebastián, Madrid y no sé cuántos sitios más encontramos calles dedicadas al dirigente socialista Indalecio Prieto, que fue el primero que tuvo conocimiento del asesinato de Calvo Sotelo, y en vez de denunciar y entregar a la Justicia a los autores del crimen, va y los ampara.
Y Santiago Carrillo tiene calles en Dos Hermanas, Getafe y algún sitio más, a pesar de tener mucha responsabilidad, por acción u omisión, en los fusilamientos masivos de Paracuellos del Jarama.
Éstos, compañero, son algunos de los dirigentes del Frente Popular que partiparon activamente en los crímenes cometidos por su bando durante la Guerra Civil, o incitaron a las masas a ejecutar una "justicia popular" que provocó decenas de miles de muertos, y a los que se dedican en las ciudades españoles las calles que se prohíbe dedicar a los criminales del otro bando. Y eso, en mi pueblo, se llama sectarismo. O todos moros, o todos cristianos.