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Kalea escribió:Te contesto al anterior quoteando este.
El enfoque va adaptándose a la madurez del niño, no puedes explicarle lo mismo a un nene de siete años que a uno de catorce y aun teniendo la misma edad hay grandes diferencias entre unos y otros.
Podría cogerse como referente en el entorno familiar los contenidos que se van dando en el escolar, por ejemplo, en infantil empiezan a conocer su cuerpo y, a través del juego, los niños aprenden las diferencias naturales. Ahí aprenden a ver los cuerpos con total naturalidad, el problema es que luego en casa, muchas veces, iniciamos la represión.
Conforme van aumentando de ciclo se van introduciendo nuevos conceptos pero, casi siempre, desde un punto de vista más científico, ahi es donde se debería de empezar a hablar de sexualidad en un lenguaje adaptado al niño. Hoy en día hay mogollón de materiales desde juegos didácticos hasta series de animación, como comentaba antes y es justo en esta etapa que sienta la base donde evitamos hablar ciertas cosas con los niños.
Una vez llegan a secundaria ya participan los servicios sanitarios municipales con charlas desde un enfoque más de prevención de enfermedades y embarazos no deseados y desde casa se puede ir hablando con ellos desde el enfoque lúdico y, por qué no, de necesidad biológica y deseo.
A ver, esto es como yo lo haría si tuviera que trabajar la educación sexual con los menores y sus familias, aprovecharía la introducción en la etapa escolar para ir ampliándole los contenidos y adaptándolos a la realidad y siempre teniendo en cuenta el grado madurativo del menor, con la misma edad no todos entienden la misma información.
Ahora mismo yo estoy viviendo una fase de preocupación constante. Mi hija tiene quince años y en el grupo de amigos hay dos chicas que me tienen flipada, no puedes imaginar las situaciones de riesgo que viven, desde el sexo masivo y sin protección hasta marcharse una sola con un grupo de chicos que acaba de conocer. La mía es excesivamente responsable con el tema y, por ahora, se basta con autoconocerse pero lo que ve la descoloca y cuando llega a casa me lo cuenta porque no sabe como decirle a esas amigas que tengan más cuidado, y ese es el momento que yo aprovecho para hablarle de sexo de tú a tú. Para conseguir esto he tenido que dedicar mucho tiempo a su formación y fíjate que incluso ella reconoce la negligencia que esas familias han cometido con las dos amigas y la falta de atención que tienen.
Ostras Kalea, no sé si te has dado cuenta, pero en tu escrito vienes a decir que debemos seguir las directrices del estado y que el estado debe tutelar la educación sexual de los padres hacia sus hijos, es decir, das por supuesto la incapacidad de los padres para criar a sus hijos en determinados temas, me parece muy fuerte, pero además me parece ineficaz y te voy a poner un ejemplo.
Para sacar el carnet de conducir, todos debemos pasar unos cursillos donde nos explican lo que debemos hacer y donde nos dicen que no se debe circular ebrio, a más velocidad de la permitida, etc. Un profesional nos enseña a conducir, las conductas adecuadas al volante, como solventar peligros, consejos, etc. A continuación el Estado nos examina y nos da apto o no apto para conducir, se supone que hemos adquirido las capacidades adecuadas para poder conducir, un actividad que coincidirás conmigo es peligrosa para nosotros y para los demás. Pues bien, después de todo esto y seguro que con los consejos dentro de la familia de que no corramos, no bebamos , etc. se producen accidentes por exceso de velocidad, por conducir ebrios entre los jóvenes, conclusión, el estado puede formar de forma impecable a un ciudadano y dar el visto bueno para su formación, pero el ciudadano va a hacer lo que le salga de la picha, aunque esté prohibido.
El caso es que aunque formemos a padres de cómo deben educar a sus hijos sexualmente (solo con decirlo me ha recorrido un escalofrío por la espalda por el nivel de control estatal), a los hijos y todo, pasará lo que el individuo quiera.
Mira, podemos ayudar a conocer el cuerpo a nuestros hijos, algo que no entiendo muy bien lo que significa, decirle que el deseo sexual es normal, algo que en las películas, libros, etc, ya ven que es algo natural y en la escuela se lo dicen también, no creo que necesites que tu padre o madre te diga que ponerte cachondo viendo a un individuo es algo natural, decirle que hay enfermedades de transmisión sexual y como evitarlas, algo sobre lo que ahora hay información a raudales o que te puedes quedar embarazada o dejar embarazada a alguien, el individuo va a hacer lo que quiera, a no ser que pienses que todavía existe de forma mayoritaria el puritanismo religioso donde todo es pecado y seguimos en el oscurantismo sexual, porque de ser así, nuestros ambientes son totalmente opuestos.
Son los padres quienes deben educar a sus hijos y si esos padres son tan catetos como para pasar por alto la formación sexual de su hijo, pues que quieres que te diga, cosa suya, yo a mis hijos me preocupé de enseñarle, bueno, sobre todo lo que le enseñe es que tenía libertad para preguntarme lo que quisiera sobre lo que quisiera y él así lo hizo, pero yo no soy nadie para meterme en la vida de nadie y decirle lo que tiene que hacer por su bien y sobre todo estoy en contra que desde el estado se haga, que sea el estado quien diga lo que el individuo debe enseñar a sus hijos, el estado debe proporcionar las herramientas necesarias, no decir cómo usarlas , ni obligar a usarlas.
Pero sigo viendo el mismo problema, el enfoque, decir lo que tiene que hacer es fácil, lo difícil es contextualizar, vamos, sexo romántico, lúdico o de procreación, cada uno tiene sus pros y sus contras, porque ceñirlos al aspecto biológico del acto puede servir para un niño de 8 años, vamos, lo típico de explicar como hacer hijos, pero es que el sexo en humanos no es solo eso y es eso otro lo que puede traer los problemas.
Yo no dudo que hayas enseñado bien a tu hijo, por lo que explicas lo has hecho bien, les has dicho los problemas del sexo y como evitarlos, pero es que el problema no es ese, como digo, el problema es el otro, si se lo has enfocado desde el aspecto lúdico, al final no deja de ser la otra persona un objeto de placer, vamos, este tio está bueno, me lo cepillo, o desde el punto de vista romántico, el sexo como expresión de amor, lo que puede terminar en frustraciones, vamos, que te encuentres con alguien que lo toma como lúdico y al día siguiente si te he visto no me acuerdo, o ya como procreación, algo que descarto por lo que explicas. A nos er que te hayas centrado en el acto biológico y estas cosas las hayas pasado pro alto, algo que yo creo que nos e debería hacer, pues a mi no me gustaría que un hijo mio cayera en tratar de objeto al otro individuo, ni que se frustrara por desengaños amorosos, ojo, que solo lo ejemplifico contigo para acercarte mi postura, que realmente me da igual ni quiero que expliques lo que has hecho tu en este aspecto, como digo aplaudo la formación que has dado a tu hija.
Y sobre lo que hacen las amigas de tu hija se pueden dar dos lecturas, bien la que tu has dado, falta de atención en casa o también se podría pensar que el mensaje que se intenta dar del sexo les ha llevado a pensar que no hacen nada malo, solo disfrutan del sexo, todo depende de quien lo mire.
Saludos
Cualquier hecho extraordinario puede ser rebatido y aún así, ser cierto.