Disturbios y crisis de Gobierno en Bélgica protagonizada por la derecha nacionalista xenófoba
Publicado: 26 Dic 2018 11:26
Cientos de manifestantes de derecha participaron en la marcha contra el pacto migratorio de la ONU en Bruselas y se enfrentaron a los miembros de los cuerpos de seguridad en medio de los disturbios.
Una serie de enfrentamientos se registraron en Bruselas, Bélgica, entre manifestantes y agentes de la policía en el desarrollo de la manifestación que fue convocada por la ultraderecha con el fin de protestar en contra del pacto de migración de la ONU.
Dicho acuerdo migratorio, que fue firmado por Bélgica, provocó la ruptura al interior del Gobierno federal, por lo que los altercados se extendieron ante la sede de la Comisión Europea, punto en el que algunos de los manifestantes lanzaron adoquines a los miembros de los cuerpos de seguridad, quienes respondieron con cañones de agua y el lanzamiento de gases lacrimógenos.
De acuerdo con los datos suministrados por un portavoz de la Policía a la agencia internacional de noticias EFE, al menos 97 personas habrían sido detenidas durante la marcha a la que acudieron cerca de 5.500 ciudadanos, pese a la prohibición inicial que había sido hecha por Rudi Vervoort, el ministro-presidente de Bruselas.
La citada prohibición fue suspendida dos días antes por el Consejo de Estado belga a través de un tribunal administrativo que consideró que el miedo a los posibles enfrentamientos por la manifestación no era un argumento válido para vetar la convocatoria.
La ultraderecha flamenca del partido Vlaams Belang, la Asociación de Estudiantes Nacionalistas y la Asociación de Estudiantes Católicos Flamencos hacen parte de las organizaciones que respaldaron la marcha contra el pacto migratorio que ha agitado el panorama político de Bélgica.
Una de las consecuencias de la mencionada agitación política es la ruptura de la coalición de gobierno de la formación nacionalista flamenca N-VA, la cual en primera instancia le había dado el visto bueno al pacto con el fin de que la migración se produjera de manera más ordenada.
El cambio de postura de la N-VA se registró en los últimos días, luego de que le dieran un plazo final a Charles Michel, el liberal francófono que ejerce como primer ministro, como una advertencia que le indicaba que, en caso de firmar el pacto, la coalición se acabaría.
https://www.france24.com/es/20181217-br ... -migracion
Una serie de enfrentamientos se registraron en Bruselas, Bélgica, entre manifestantes y agentes de la policía en el desarrollo de la manifestación que fue convocada por la ultraderecha con el fin de protestar en contra del pacto de migración de la ONU.
Dicho acuerdo migratorio, que fue firmado por Bélgica, provocó la ruptura al interior del Gobierno federal, por lo que los altercados se extendieron ante la sede de la Comisión Europea, punto en el que algunos de los manifestantes lanzaron adoquines a los miembros de los cuerpos de seguridad, quienes respondieron con cañones de agua y el lanzamiento de gases lacrimógenos.
De acuerdo con los datos suministrados por un portavoz de la Policía a la agencia internacional de noticias EFE, al menos 97 personas habrían sido detenidas durante la marcha a la que acudieron cerca de 5.500 ciudadanos, pese a la prohibición inicial que había sido hecha por Rudi Vervoort, el ministro-presidente de Bruselas.
La citada prohibición fue suspendida dos días antes por el Consejo de Estado belga a través de un tribunal administrativo que consideró que el miedo a los posibles enfrentamientos por la manifestación no era un argumento válido para vetar la convocatoria.
La ultraderecha flamenca del partido Vlaams Belang, la Asociación de Estudiantes Nacionalistas y la Asociación de Estudiantes Católicos Flamencos hacen parte de las organizaciones que respaldaron la marcha contra el pacto migratorio que ha agitado el panorama político de Bélgica.
Una de las consecuencias de la mencionada agitación política es la ruptura de la coalición de gobierno de la formación nacionalista flamenca N-VA, la cual en primera instancia le había dado el visto bueno al pacto con el fin de que la migración se produjera de manera más ordenada.
El cambio de postura de la N-VA se registró en los últimos días, luego de que le dieran un plazo final a Charles Michel, el liberal francófono que ejerce como primer ministro, como una advertencia que le indicaba que, en caso de firmar el pacto, la coalición se acabaría.
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