Andrea Levy asegura que el PP es un partido "revolucionario"

[DistinguidoBourdieu]

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Cómo anda el patio, Cospedal también dijo que eran el partido de los trabajadores

El PP posiblemente no sea el partido que mejor defiende los intereses objetivos de los trabajdores españoles, pero acumula más voto obrero del que IU, que siempre fue un partido de universitarios, consiguió en toda su existencia. El discurso del miedo al inmigrante y el "yo me rompo los cojones trabajando y no reparto mi riqueza con nadie" ha calado más hondo en las clases populares que la defensa del ecologismo, de las minorías sexuales y étnicas, los derechos humanos, la plurinacionalidad, el republicanismo... y posiblemente que el elitismo universitario de Pablo Iglesias, sus nosécuántas matrículas de honor y su cohorte de profesores.

El secreto de que el PP haya penetrado mas exitosamente en las clases populares que la izquierda mas intelectualoide es precisamente porque el PP maneja las claves del populismo mucho mejor que estas.
El PP es un partido netamente Populista,así lo desvela no ya su propia etimología, sino el planteamiento estatutario de su fundador.

e-spacio.uned.es/fez/eserv/bibliuned:DerechoPolitico-1980-06-10078/PDF

Nosotros tenemos que aspirar a recoger de nuevo a esa gran fuerza que está
ahí; en un verdadero populismo, como el que sugiere nuestro mismo nombre, el
de Alianza Popular. Ni podemos renunciar a él ni actuar de modo incongruente
con esa idea: en la que quepa todo el pueblo, toda la sociedad real; que no se
estrecha de modo que un aldeano, o un trabajador, o un estudiante, no se pueden
encontrar representados.

saludos

Totalmente de acuerdo, pero no hay que olvidarse de eso que podríamos llamar el espíritu de la época. El populismo verstryngianofraguil de Alianza Popular naufraga una y otra vez ante Felipe González. El apogeo del populismo aznaril que iba a limpiar las calles de pequeños delincuentes mientras llenaba los ministerios, las alcaldías, las cajas de ahorros y las antiguas empresas públicas con los grandes, su asalto al antiguo "cinturón rojo", llega con la época de la bonanza económica y el espantajo de la inmigración.