BALEARES
Nadie quiere ser policía en Ibiza
El precio de la vivienda supera el sueldo y el plus de insularidad es menos de la mitad que en Canarias
El comisario Mariscal de Gante advierte a los futuros agentes: "No compensa"
La plantilla está incompleta desde que se planificó en 2007 para una población un 33% menor
Ser policía en Ibiza sale carísimo. A las funciones de servir y proteger los agentes han añadido la de sobrevivir en una isla donde el alquiler en invierno supera los 1.600 euros de media, y en verano ni existe. Para colmo, al Ministerio del Interior pillar delincuentes en Baleares le sale mucho más barato que en Canarias, donde el plus de insularidad que reciben los agentes es más del doble.
El presidente del Consell de Ibiza, el socialista Vicent Torres, pidió ayer a la nueva delegada del Gobierno María Salom una solución a este «problema estructural que padece la isla por la falta de agentes». También se lo pidió a su antecesora, y su antecesor en el Consell al correspondiente delegado del Gobierno. Y así desde hace al menos cuatro legislaturas sin que nadie se haya animado a solucionar el problema.
La plantilla de Ibiza está formada por 287 agentes de los que se cubren 241 plazas. Para el Jefe Superior de Policía de Baleares, Antonio Emilio Jarabo, esta ocupación del 83,99% está más o menos «en la media». Aunque falta un detalle. Las plazas se planificaron para el 2007, cuando la población en la isla era de algo más de 100.000 personas. Hoy roza los 150.000 con picos en agosto de 400.000. Es cierto que la mayor parte de la isla es jurisdicción de la Guardia Civil pero por desgracia su situación no es mejor.
Salom aseguró ayer en Ibiza que iba a intentar llegar acuerdos con instituciones por si podía hacer algo con el problema del alojamiento. También que tanto «la reposición de las plazas, como la acuciante falta de vivienda y la insuficiencia del plus de insularidad» eran problemas que había trasladado personalmente al ministro del Interior, Juan Ignacio Zoido, quien al parecer le dijo que «lo tenía sobre la mesa» y era «un problema prioritario».
Pero las noticias que llegan desde Interior apuntan precisamente a lo contrario. El nuevo comisario de Ibiza, Jose Manuel Mariscal de Gante, hermano de la que fuera ministra de Justicia de Aznar, explicó que nada más llegar al cargo pidió refuerzos al Jefe Superior de Policía, aunque solo fuera para el verano, pero que ya le comunicaron que «va a estar complicado».
Aunque acaba de llegar, Mariscal de Gante ya sabe lo que le toca en su nuevo destino: «A nadie le compensa venir porque se lo gastaría todo en el alojamiento». Y recordó el agravio comparativo del plus de insularidad con Canarias.
Desde Alternativa Sindical, Carlos Muñoz, apunta además que las dietas que recibe un agente de refuerzo o de prácticas de verano en la isla de Ibiza son iguales a las del resto de la Península, sin que se compense la insularidad. Y recuerda que los agentes en prácticas, que en algún momento se vendieron ante la opinión pública como refuerzo, no son una solución, ya que son «agentes cuyas funciones se ven limitadas».
Un agente de la Policía Local de Ibiza alquila un piso de tres habitaciones a 'nacionales' desde hace diez años. El trajín es constante. «Están lo que les toca y cuando cumplen piden el traslado», explica. De momento ninguno de los que ha tenido ha pedido quedarse en la isla.
El resultado es que en el último balance de criminalidad de la Delegación del Gobierno, donde es casi imposible que salga algún dato negativo, se hacía mención al aumento en la isla de los robos en coches y especialmente en viviendas, donde llegaron a 862, una media de más de dos al día, en 2015.
Un agente de Tenerife o Las Palmas recibe un plus de territorialidad de 137,07 euros al mes, además de otros 323 euros de plus de residencia, frente a los 138,14 euros de territorialidad que reciben en Ibiza, y los 81 euros por residencia. Es decir 461,14 euros para un policía destinado a Canarias frente a los 218,07 que recibe un agente en Baleares.
La cifra, aun así, seguiría siendo insuficiente para una Ibiza que se encuentra, según una expresión popularizada por todas las instituciones, en «emergencia habitacional». Y donde es más fácil encontrar un trabajo que una vivienda.
El problema de la vivienda no solo afecta a la Policía, sino también a los guardias civiles, funcionarios, médicos, trabajadores de temporada o cualquiera que tenga la feliz idea de mudarse a esta isla.
http://www.elmundo.es/baleares/2017/01/ ... b4694.html
Nadie quiere ser policía en Ibiza por los precios de los alquileres
Re: Nadie quiere ser policía en Ibiza por los precios de los alquileres
El problema de vivienda en Ibiza es ya de maximo nivel para cualquiera que no tenga inmueble en propiedad. Sencillamente no hay sitio para toda la gente que queire venir y la que hace falta para cubrir los servicios. Este problema se lo encuentra cualquier funcionario al que destinen alli, ya sea policia, enfermera, maestro...
Las empresas de restauracion y hoteles se ven obligados a ofrecer hospedaje a los trabajadores si quieren cubrir plantilla, ya que es imposible encontrar habitacion a precio minimamente decente en los meses de verano.
http://periodicodeibiza.es/pitiusas/loc ... euros.html
´Por otro lado lo de que en Canarias el plus sea el doble me parece un chiste de mal gusto, estnado el nivel de vida en Ibiza mucho mas alto y con el mismo problema de insularidad que canarias, sea cual sea la distancia que la separa de la peninsula.
LA verdad, no se cual es la solución a todo esto. Seguramente a nivel funcionarial se acabara construyendo residencias como complemento de sueldo.
Las empresas de restauracion y hoteles se ven obligados a ofrecer hospedaje a los trabajadores si quieren cubrir plantilla, ya que es imposible encontrar habitacion a precio minimamente decente en los meses de verano.
http://periodicodeibiza.es/pitiusas/loc ... euros.html
´Por otro lado lo de que en Canarias el plus sea el doble me parece un chiste de mal gusto, estnado el nivel de vida en Ibiza mucho mas alto y con el mismo problema de insularidad que canarias, sea cual sea la distancia que la separa de la peninsula.
LA verdad, no se cual es la solución a todo esto. Seguramente a nivel funcionarial se acabara construyendo residencias como complemento de sueldo.
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Desencanto
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Re: Nadie quiere ser policía en Ibiza por los precios de los alquileres
Construcciones, o de esas viviendas embargadas, que debe de tener
la CCAA, pueden darse para la peña, sean médicos, enfermeras, policías,
en relación con los servicios públicos que se necesitan.
O que la comunidad construyan 'viviendas', sin ser de lujo, para los puestos
que no tengan familiares y no puedan vivir en casa papi.
la CCAA, pueden darse para la peña, sean médicos, enfermeras, policías,
en relación con los servicios públicos que se necesitan.
O que la comunidad construyan 'viviendas', sin ser de lujo, para los puestos
que no tengan familiares y no puedan vivir en casa papi.
La verdad está ahí afuera
Re: Nadie quiere ser policía en Ibiza por los precios de los alquileres
Sin casa en Ibiza, se exilian en Mallorca
Maite Torres y su compañero dejan la vivienda "realquilada" donde están porque en temporada los echan para poder alquilarla por semanas
Ni una vivienda para alquilar a un precio razonable ni tampoco una habitación en un piso para una pareja. Maite Torres y su compañero llevan tiempo buscando dónde vivir y no ha habido forma, por lo que en previsión de la situación en que se encontrarán en breve han decidido no esperar más. "En vista de que no encontrábamos nada, de que lo que había era a unos precios que no se podían pagar, te vas, directamente. Te planteas: 'No voy a encontrar nada, ¿espero hasta el último momento? No'", comenta Maite antes de su partida, con las maletas prácticamente cerradas.
La decisión no es fácil, pues en la isla dejan empleos estables. Maite trabajaba en el aeropuerto y tenía contrato para los próximos cuatro años. "Yo estaba encantada, con unos horarios buenísimos", dice. Él ocupaba un puesto en una cadena de supermercados. Su futuro es algo incierto en Palma, su próximo destino, pues aunque su pareja ya "ha encontrado algo", ella todavía no, pero la situación obliga.
Casi 20 años en la isla
Maite explica que llevaba "casi 20 años" viviendo en Eivissa. Durante años estuvo casada y entonces residía con su marido en una casa de los padres de él. Cuando se divorciaron, "en 2010 o 2011", ella regresó a Valencia para estar con su familia. "Pero en vista de que en la Península el tema de trabajar estaba fatal, volví y me quedé alucinada al ver cómo estaba la isla", resalta.
Era abril de 2016 y Maite regresó a su trabajo en el aeropuerto, donde había estado antes y donde le guardaban la plaza, comenta. Entonces, con los alquileres casi imposibles, un amigo le ofreció alojarla en su vivienda durante los meses de temporada. "Mi mejor amigo me dijo: 'No busques nada, vente conmigo a casa'. Y así estuvimos", cuenta.
Finalizada la temporada, buscó casa y encontró una habitación por 500 euros al mes para ella y su pareja en un piso compartido de ses Figueretes que, denuncia, "está realquilado". "Estamos en una casa realquilada. Una mujer ibicenca se lo ha alquilado a un matrimonio de italianos. Y ellos –que no viven allí–nos dejan las habitaciones por 500 euros en invierno, pero en mayo nos echan y lo alquilan por semanas", cuenta.
Ellos compartían piso con otras dos personas, pero una de ellas ya se ha ido también, subraya Maite, quien no sabe si la propietaria del piso sabe qué hace con él el matrimonio al que se lo ha alquilado.
"Nos metimos buscando para todo el año, para no tener que estar mudándonos", cuenta y añade además que aunque han buscado alternativas, no han logrado encontrar ninguna. "Casa para todo el año es imposible, imposible de pagar. Nos estaban pidiendo 1.200 euros por un estudio de 40 metros cuadrados; barbaridades. Y ni siquiera una habitación, porque para una persona sí que se encuentran, pero para parejas no", afirma. Intentaron incluso llegar a un acuerdo para quedarse en verano en el piso en el que están pagando "100 o 200 euros más", pero les han dicho que no.
Sueldos
"Cuando yo vine a Eivissa valía la pena porque cobrabas el doble que en la Península o más. Pero es que ahora los sueldos son como los de la Península o, en según qué sitios, incluso menos", apunta e insiste en que a eso hay que sumarle el problema de la vivienda, que es "horrible". En Palma todavía no tienen casa, pero confían en encontrar: "De momento nos vamos con un amigo hasta que estemos allí y veamos alguna que nos convenza".
http://www.diariodemallorca.es/mallorca ... 92068.html
Maite Torres y su compañero dejan la vivienda "realquilada" donde están porque en temporada los echan para poder alquilarla por semanas
Ni una vivienda para alquilar a un precio razonable ni tampoco una habitación en un piso para una pareja. Maite Torres y su compañero llevan tiempo buscando dónde vivir y no ha habido forma, por lo que en previsión de la situación en que se encontrarán en breve han decidido no esperar más. "En vista de que no encontrábamos nada, de que lo que había era a unos precios que no se podían pagar, te vas, directamente. Te planteas: 'No voy a encontrar nada, ¿espero hasta el último momento? No'", comenta Maite antes de su partida, con las maletas prácticamente cerradas.
La decisión no es fácil, pues en la isla dejan empleos estables. Maite trabajaba en el aeropuerto y tenía contrato para los próximos cuatro años. "Yo estaba encantada, con unos horarios buenísimos", dice. Él ocupaba un puesto en una cadena de supermercados. Su futuro es algo incierto en Palma, su próximo destino, pues aunque su pareja ya "ha encontrado algo", ella todavía no, pero la situación obliga.
Casi 20 años en la isla
Maite explica que llevaba "casi 20 años" viviendo en Eivissa. Durante años estuvo casada y entonces residía con su marido en una casa de los padres de él. Cuando se divorciaron, "en 2010 o 2011", ella regresó a Valencia para estar con su familia. "Pero en vista de que en la Península el tema de trabajar estaba fatal, volví y me quedé alucinada al ver cómo estaba la isla", resalta.
Era abril de 2016 y Maite regresó a su trabajo en el aeropuerto, donde había estado antes y donde le guardaban la plaza, comenta. Entonces, con los alquileres casi imposibles, un amigo le ofreció alojarla en su vivienda durante los meses de temporada. "Mi mejor amigo me dijo: 'No busques nada, vente conmigo a casa'. Y así estuvimos", cuenta.
Finalizada la temporada, buscó casa y encontró una habitación por 500 euros al mes para ella y su pareja en un piso compartido de ses Figueretes que, denuncia, "está realquilado". "Estamos en una casa realquilada. Una mujer ibicenca se lo ha alquilado a un matrimonio de italianos. Y ellos –que no viven allí–nos dejan las habitaciones por 500 euros en invierno, pero en mayo nos echan y lo alquilan por semanas", cuenta.
Ellos compartían piso con otras dos personas, pero una de ellas ya se ha ido también, subraya Maite, quien no sabe si la propietaria del piso sabe qué hace con él el matrimonio al que se lo ha alquilado.
"Nos metimos buscando para todo el año, para no tener que estar mudándonos", cuenta y añade además que aunque han buscado alternativas, no han logrado encontrar ninguna. "Casa para todo el año es imposible, imposible de pagar. Nos estaban pidiendo 1.200 euros por un estudio de 40 metros cuadrados; barbaridades. Y ni siquiera una habitación, porque para una persona sí que se encuentran, pero para parejas no", afirma. Intentaron incluso llegar a un acuerdo para quedarse en verano en el piso en el que están pagando "100 o 200 euros más", pero les han dicho que no.
Sueldos
"Cuando yo vine a Eivissa valía la pena porque cobrabas el doble que en la Península o más. Pero es que ahora los sueldos son como los de la Península o, en según qué sitios, incluso menos", apunta e insiste en que a eso hay que sumarle el problema de la vivienda, que es "horrible". En Palma todavía no tienen casa, pero confían en encontrar: "De momento nos vamos con un amigo hasta que estemos allí y veamos alguna que nos convenza".
http://www.diariodemallorca.es/mallorca ... 92068.html